Bienvenido Santo Padre

Cambiar el mundo

Sin Autor

Un obispo africano, monseñor Chichester, de Salisbury, sorprendió a Pío XII cuando le preguntó: “Santidad, ¿duerme bien por las noches?”. Pío XII, con gesto de asombro, respondió que sí, pero que si se lo preguntaba por algún motivo. Entonces le explicó el obispo que cuando era pequeño su madre le pedía que rezara un Avemaría por el Papa de Roma, para que pueda dormir tranquilo a pesar de sus muchas preocupaciones. Desde entonces había venido rezando siempre esa Avemaría, y ahora tenía curiosidad por saber el resultado.

Tarea de todos los católicos es estar ahora más unidos que nunca, rezando por la santidad del Papa. Me parece que lo que va a agradecer siempre es nuestra oración, la de todos los cristianos unidos. El Papa es el Vicecristo, el Papa es Pedro. El Papa es el representante de Dios en la tierra.

Es deseable que nuestro amor de cristianos sea Jesucristo, María Santísima, San José, y el Papa por encima de todo. Los católicos somos una familia unidos en torno al Papa, al que queremos y defendemos con uñas y dientes. Con todo el amor que muestra un buen hijo a su padre siempre, cuando es joven y cuando es mayor, cuando coincide con nuestro modo de ver las cosas o cuando no. El Papa es el Papa.

Bienvenido nuestro nuevo Papa. ¡Bendito sea Dios!

Rafael de Mosteyrín Gordillo