Una terrible masacre ha conmocionado al estado de Benue, Nigeria, donde al menos 200 cristianos fueron asesinados este fin de semana por radicales armados. El ataque, perpetrado durante la noche, tuvo como víctimas a personas que dormían en alojamientos temporales, muchos de ellos desplazados internos. Los asaltantes recurrieron a métodos brutales, quemando, acuchillando y disparando a quienes intentaban huir.
Según un informe de primera mano recibido por Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), los atacantes, identificados como fulanis por el clero local, irrumpieron gritando «Allahu Akhbar». Horas antes, la policía había logrado repeler un asalto a una iglesia, donde se refugiaban hasta 700 desplazados. Sin embargo, los radicales redirigieron su ataque y prendieron fuego a las puertas del albergue que cobijaba a más de 500 personas antes de abrir fuego indiscriminadamente.
La Diócesis de Makurdi ha confirmado la devastadora escena, con cadáveres, incluyendo los de bebés, niños y adultos, esparcidos y, en muchos casos, quemados hasta quedar irreconocibles. El padre Ukuma Jonathan Angbianbee quien escapó por poco de la muerte, describió lo que presenció como «espantoso».
El padre Jonathan y otros miembros del clero han expresado su preocupación por la insuficiente respuesta de seguridad, señalando la falta de preparación de la policía para contener el ataque al mercado. Se cree que estos actos como parte de un plan yihadista coordinado para usurpar tierras y llevar a cabo una limpieza étnica de la comunidad cristiana en la región, predominantemente católica.
El Papa León XIV ha lamentado la «terrible masacre», ofreciendo sus oraciones por las víctimas y por la paz en Nigeria. Esta tragedia se suma a un preocupante aumento de la violencia en el estado de Benue. ACN ha condenado enérgicamente esta masacre y ha hecho un llamado a la oración continua por el fin de la persecución contra los cristianos en Nigeria.
Fuente: Ayuda a la Iglesia Necesitada