Michael Jackson era conocido, entre otras cosas por su espiritualidad. La película de Liana Marabini «Un regalo de Dios» cuenta todos estos aspectos desconocidos del «rey del pop».
En una entrevista explica que descubrió «que Michael era completamente diferente en la vida normal, todo lo contrario de lo que veíamos en el escenario. Era muy tímido y complejo, bondadoso, caritativo y muy creyente.»
Después de bucear en las distintas creencias religiosas con la Fe Católica fue un amor a primera vista cuando se encontraba en la Ciudad Eterna para un concierto. Mientras visitaba la ciudad, se sintió atraído por el sonido del Ave María de Schubert que salía de una iglesia y entró a hablar con el párroco.
Admiraba mucho a Juan Pablo II y lo llamaba «un faro de luz y de esperanza».
Algunos tendrán en mente el escándalo que se organizó cuando fue acusado de abusos a menores, pero siempre fue declarado inocente.
Fuente: Exaudi