A veces puede ser complicado según las circunstancias, traer una criatura al mundo. Pero la solución no es matar a esa personita que viene sino afrontarlo pidiendo ayuda.
En Europa Press publican el caso de Leidy, una joven estudiante de 22 años a la que ha entrevistado. Se quedó embarazada y su novio sólo quería que abortase. Su madre más veladamente pero también le decía que se iba a arruinar la vida. Él la dejó y su madre se desentendió. Te podrás imaginar la situación porque ella quería seguir adelante con su bebé pesar de que estaba muerta de miedo.
Por supuesto tuvo que dejar sus estudios y su trabajo, tuvo una depresión, lloraba todos los días hasta que dio a luz, lo pasó muy mal. Tuvo serias complicaciones que recomendaban el aborto. Pero al final nació un lindo bebé.
Ha pasado casi un año desde que dio a luz. Ahora vive con su madre y la Fundación Red Madre le facilita todo lo necesario para su bebé –leche, pañales y ropa–. Esta organización apoya a mujeres que se enfrentan a un embarazo inesperado, bajo el lema ‘Nunca estarás sola’.
Te recomiendo que leas el artículo completo para que te des cuenta de que a pesar de las dificultades, se puede salir adelante felizmente.