Daniel, en primer lugar nos gustaría que nos contaras tu historia y como vives la fe en el arte del toreo.
Nací en el seno de una familia cristiana. Soy el mayor de 5 hermanos, y ya desde muy joven empezó a apasionarme el mundo del toreo, gracias a la relación de mi familia con este.
Respecto a cómo lucho por vivir la fe, me gustaría decir que a pesar de lo que mucha gente cree, detrás del toreo hay una liturgia mucho más profunda de lo que parece. Por ejemplo, en todas las plazas de toros hay una capilla, para que los toreros puedan rezar.
¿Cómo es el día a día en la vida de un joven novillero?, ¿Rezas antes de las novilladas?, ¿Tienes miedo en la plaza?
A mediados de Octubre finaliza la temporada, que no vuelve a empezar hasta Marzo. Esos 5 meses son de preparación y, a pesar de lo que pueda parecer, en mi caso por lo menos son los más intensos ya que compatibilizo mis estudios universitarios con el entrenamiento.
Lo cierto es que, por el hecho de tener una novillada, no rezo especialmente. La fe no es algo que yo «utilice´´ para que me vayan bien las cosas en la vida. Procuro vivirla del mismo modo todos los días, aunque, evidentemente, mis ratos de oración antes de las novilladas son más intensos, ya que, cuando uno va torear, es consciente de lo poco que es y de lo mucho que depende de Dios. Esto me ayuda a dar gracias al Señor todos los días, pero especialmente después de las novilladas, independientemente de que hayan salido bien o mal. Además, procuro repetir una jaculatoria, «Deo Omnis Gloriae´´, (para Dios toda la gloria), que me ayuda a mantener la presencia de Dios.
En los momentos previos a torear sí que se pasa mucho miedo, la verdad. No solo por el toro, sino también por el miedo al fracaso, aunque procuro abandonarme en las manos de Dios.
En tu opinión, ¿Que hace falta para que otros chicos y chicas descubran su vocación cristiana?
En mi opinión, aquí entran dos factores fundamentales para que cualquier persona descubra su camino en esta vida: el trabajo bien hecho y la oración; los medios humanos, y los sobrenaturales.
Es imposible descubrir tu camino si solamente piensas en ti mismo, en hacer tu trabajo, y dejas a Dios de lado. Pero, por otra parte, el trabajo puede ser un medio para acercarnos a Dios, siempre y cuando se luche por hacerlo de la mejor manera posible.
Además de esto entra la oración, que es fundamental. Si no se tiene esa intimidad con Dios, de ser capaces de sentarnos enfrente del sagrario y hablar realmente con Él, es imposible que una persona descubra su camino.
¿Es difícil en el mundo del espectáculo vivir la Fe?
Si una persona tiene la fe fuertemente arraigada dentro de sí, es muy difícil que las circunstancias exteriores le condicionen a no vivirla bien. Es cierto que muchas veces el mundo del espectáculo no ayuda, pero si uno lucha puede vivirla sin problema.
En cambio, si una persona no vive habitualmente coherentemente con su fe, en cuanto se den unas circunstancias mínimamente agresivas, como puede ser el mundo del espectáculo, su fe probablemente se desmoronará por completo.
Para finalizar, ¿Que sentiste cuando este año saliste por la puerta grande al ser el triunfador de las novilladas de promoción de Sevilla?
Sentí una gran alegría, no solo por mí, sino también por todas esas personas que han luchado para que esto fuera posible. Hay muchas personas que han dedicado su tiempo en ayudarme constantemente, por lo que ese pequeño triunfo es especialmente suyo.