El amor no es mediocre, tampoco es cómodo, ni interesado. Te pone en movimiento y te hace salir de ti mismo para mirar al otro, para mirarlo bien, de dentro para fuera y de afuera para dentro y así poder entender, comprender, sorprenderse, admirar, respetar y aprender.
El amar te lleva a conocer y el conocer te lleva a amar.
Amar te mantiene ilusionado, motivado, libre y vivo.
El amor te lleva a buscar el bien del otro, a hacerlo feliz.
Dios en su gran creatividad se sirve de la atracción como palanca para ayudarnos a hacer feliz a alguien.
Todo está bien hecho y todo tiene un sentido.
Somos una pieza clave y única.
Por el amor del que es el Amor somos libres y solo amando nunca seremos esclavos.
Los sucedáneos no llenan.
Lo auténtico te desborda.
Más servir y menos exigir.
El amor ni calcula ni pone excusas.
El amor es natural y sencillo.
El amor apuesta y se entrega.
Si has nacido es para cosas grandes.
Qué no te engañen.
No te conformes.
¡Juégatela!
¡Sana lo que tengas que sanar y sé valiente para amar!
Miriam Pareja