Testimonios hay muchos, y todos brutales… actos de personas de las que han dependido vidas, muchas vidas. Hay una peli en la que se habla de como 20 segundos de corage irracional pueden cambiar toda una vida… pues bien, te diré que esos 20 segundos los hemos visto en numerosas historias. En las que el chico se declaró a la chica (y ahora son una gran familia), aquella en la que el bombero decide salvar al chico (a pesar de las indicaciones de desalojar el edificio), o el momento en el que un joven acepta su vocación y es sacerdote… ¡y ayuda a miles de almas!
Te preguntarás cual es el testimonio de hoy… el de hoy es el tuyo y no es ninguna broma, sino algo muy serio. En tu vida te cruzarás con miles de almas y la salvación, la felicidad de muchas de ellas pueden depender de tus acciones… de tus 20 segundos de corage internacional. ¿Y que son estos segundos? Estos segundos son maravillosos, aquellos en los que te da un chute de alegría, haces posible lo imposible y sigues la voluntad de Dios en ese momento. Son 20 segundos en los que puedes dar un consejo, ayudar a un invidente a cruzar la calle o decir un te quiero a tu madre. Son 20 segundos alocados y enamorados en los que actuas como el mismo Cristo y eres ¡alter Christus!
El problema, el gran reto al que te vas a enfrentar, es si estás dispuesto a ser valiente. No es fácil. Puede que después de esos 20 segundos se rían de ti, sin embargo a lo mejor con ellos puedes conseguir lo que está al alcance de muy pocos… INSPIRAR. Hay una frase muy bonita: «La fuerza de los valientes, cuando caen, se pasa a la flaqueza de los que se levantan», y es que eso no tiene precio. Pídele ayuda a Cristo para que esos 20 segundos de corage irracional, sean en tu vida cada vez más racionales, por el simple hecho de ser cada vez más valiente y estar más dispuesto a actuar según nuestro modelo: Jesús.
